Qué diferencias hay entre el embrague tradicional y los sistemas autoajustables

¿Crees que existen diferencias entre un embrague tradicional y sistemas autoajustables? Si has dicho que sí, estás en lo correcto. El embrague es un sistema que se encarga de transmitir la potencia del motor de forma secuencial a las ruedas.

Instalado entre el motor y las ruedas, su actuación es similar a un fusible o a un elemento que estabiliza las frecuencias de movimiento del motor, los cuales no son completamente cíclicas sino acíclicas.

No obstante, no existe un solo tipo de embrague, sino que en la actualidad presentan tipos diferentes. Y en este nuevo material de Recambios Punto Red mostramos las principales diferencias entre el embrague tradicional y los sistemas autoajustables.

Embrague tradicional y sistemas autoajustables: las diferencias más resaltantes

Antes de empezar a diferenciar un embrague tradicional y un sistema ajustable automático, queremos decirte que en Recambios Punto Red somos expertos en el recambio que tu coche necesita, y solo ofrecemos primeras marcas; tenemos kits de embrague, arranques, motores bimasa, frenos, baterías y más, con la mejor asesoría telefónica completamente personalizada.

¿Hay diferencias entre los sistemas tradicionales y autoajustables? Claro que las hay, y a continuación te ofrecemos las principales diferencias que encontrarás en estos sistemas de embrague.

Diferentes formas

Los sistemas tradicionales de embrague presentan una forma más sencilla de construcción, en la que se puede apreciar una carcasa que recubre el disco y diafragma y el recorrido del pedal es largo.

En cambio, un sistema autoajustable tiene diversas variaciones en la carcasa, incluyendo un aro acuñado que es el encargado de compensar el desgaste del disco para mantener el diafragma en la misma posición, lo que se traduce en un recorrido de pedal mucho más corto y un desembrague más sencillo.

Pedal más suave

En un embrague autoajustable, el pedal de cambio siempre se encontrará más suave que en un sistema tradicional. ¿El secreto? No hay ninguno. Solo que la tecnología de estos sistemas de embrague involucra entre la carcasa y la plancha un aro acuñado con resortes, que compensa el desgaste del disco de embrague durante la vida útil del coche.

Con esta tecnología, el diafragma no se moverá de una sola posición y la compensación del desgaste por parte del aro permitirá que el diafragma se mantenga uniforme, traduciéndose en la misma suavidad del pedal en todo momento.

En cambio, en un sistema convencional, se prescinde de este aro. Por tanto, como no existe un sistema que compense el desgaste del disco, el diafragma comenzará a subir y el pedal comenzará a endurecerse. Esto se puede notar en las gráficas comparativas de accionamiento entre un embrague convencional y un sistema autoajustable.

Instalación especializada

Para instalar un sistema autoajustable o para su mantenimiento, es necesario contar con herramientas especializadas de montaje. ¿Con qué fin? Con la finalidad de evitar desajustes, como la liberación del disco de forma incorrecta, así como daños al volante bimasa.

Además, para que un sistema ajustable sea compatible con uno tradicional, los barrenos de instalación deben estar alineados perfectamente entre sí. Si alguno de los barrenos está en otra posición, el sistema autoajustable no será compatible con el tradicional y, por tanto, no se podrá instalar en el volante del coche.

El embrague tradicional y sistemas autoajustables se conoce mejor en Recambios Punto Red

Esperamos que con este resumen tengas más claras las diferencias entre estos dos sistemas que dominan en la actualidad el mercado de los embragues. Y si necesitas recambios de embragues tradicionales y sistemas autoajustables, no esperes más y contacta a Recambios Punto Red, tenemos la mejor experiencia y asesoramiento telefónico a disposición.